A medida que las herramientas y materiales de costura vayan aumentando, valdrá la pena invertir en un buen costurero donde puedan guardar con comodidad todos sus "nuevos tesoros" Lo ideal es alguna caja o maletín de tapa transparente con divisiones móviles. La tapa transparente permite conocer el contenido sin necesidad de abrirlo y las divisiones móviles nos dan la posibilidad de personalizar los espacios de acuerdo a lo que tengamos en el momento.
Los hilos tendrían que entrar idealmente acostados (como en el costurero de la foto) para poder ver los colores con facilidad, o parados (que termina siendo un poco incómodo a la hora de saber con qué tonos contamos). Para los objetos pequeños -como los alfileres- se pueden usar pastilleros o reciclar algún envase transparente.
Telas, cintas y accesorios deberían ir guardados por separado. No tiene mucho sentido que para coser un botón tengamos que acarrear una caja gigante.
Este costurero en particular es un maletín doble desmontable (tiene uno idéntico unido atrás donde guardo los elementos de la máquina de coser); pero en la práctica, dos cajas o maletines cumplirían la misma función.
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